¿Te has dado cuenta que cada día escuchamos más sobre el cortisol? Si bien tiene una relación estrecha con el estrés crónico, esta hormona también interviene, por ejemplo, en la respuesta inmunológica del cuerpo. ¿Sabes cómo están tus niveles? Descubre cómo medirlo y por qué es importante.
El cortisol es una hormona esteroide producida por las glándulas suprarrenales, que están ubicadas encima de los riñones, y es clave para el funcionamiento adecuado del organismo.
En las últimas décadas, el cortisol ha tomado mayor notoriedad dada su relación con el estrés crónico, una condición que afecta a cada vez más personas a nivel mundial, influyendo tanto en su salud física como mental y emocional.
“Es importante comprender que nuestro cuerpo necesita el cortisol para llevar a cabo distintas funciones, sin embargo, el problema surge cuando sus niveles están elevados de forma constante o también, cuando están bajo los rangos recomendados”, explicó la doctora Elizabeth Zuñiga, Médico general de Andes Salud Los Ángeles.
¿Te has medido alguna vez los niveles de cortisol? Sigue leyendo para conocer por qué es recomendable mantenerlo a raya.
¿Cuáles son las funciones del cortisol?
Aunque generalmente asociamos el cortisol a la respuesta “lucha-huída”, mecanismo automático de supervivencia que prepara al organismo para tomar acciones ante un peligro inminente, esta hormona también cumple un rol crucial en otros mecanismos vitales.
Como señaló la Dra. Zuñiga, entre las principales funciones del cortisol, están la regulación de:
- Metabolismo: el cortisol ayuda a metabolizar carbohidratos, proteínas y grasas, además de promover la gluconeogénesis, que es la formación de glucosa a partir de otras fuentes como aminoácidos y ácidos grasos.
- Sistema inmunológico: esta hormona tiene efectos sobre el sistema inmunológico, tanto suprimiendo como regulando la respuesta inflamatoria. En situaciones de estrés prolongado, un aumento crónico de cortisol puede afectar negativamente la función inmunológica.
- Ciclo circadiano: el cortisol sigue un patrón diurno, con niveles más altos por la mañana que disminuyen hacia la noche. Esta variación está relacionada con el ciclo de sueño-vigilia y ayuda a mantener un ritmo circadiano adecuado.
- Funciones metabólicas en tejidos periféricos: esta hormona también tiene efectos en diferentes tejidos del cuerpo, como los músculos y el tejido adiposo, donde puede influir en el metabolismo de los nutrientes y la distribución de la grasa corporal.
¿Cómo se mide y cuáles son los rangos saludables?
Los niveles de cortisol se pueden monitorear a través de una muestra de sangre, orina y/o saliva, exámenes que puedes realizarte en los Laboratorios y Servicio de Toma de Muestra de nuestras clínicas y centros médicos Andes Salud.
Como los valores pueden variar dependiendo la hora del día, los rangos aproximados para cada periodo son:
- Mañana (aproximadamente de 6 a 8 a.m.): entre 6 y 23 microgramos por decilitro (mcg/dL) o 166 y 635 nanomoles por litro (nmol/L).
- Tarde (aproximadamente de 4 a 6 p.m.): entre 3 y 16 mcg/dL o 83 a 441 nmol/L.
- Noche (aproximadamente de 11 p.m. a 12 a.m.): entre 1 y 8 mcg/dL o 28 a 221 nmol/L).
¿Qué hábitos ayudan a mantenerlo bajo control?
El cortisol puede ser muy beneficioso cuando está en los rangos recomendados. Para mantenerlo a raya, es recomendable practicar actividades como:
- Ejercicio físico regular
- Meditación y respiración profunda
- Dormir las horas recomendadas
- Alimentarse equilibradamente
- Escuchar música y bailar
- Pasar tiempo en la naturaleza
- Evitar el tabaco y el alcohol
¿Te gustaría saber si tienes niveles adecuados de cortisol? ¡Te esperamos en nuestros Laboratorios y Servicios de Toma de Muestra! Recuerda acudir con tu orden médica, la atención es por orden de llegada.
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