Junto con el ejercicio físico regular, mantenernos activos durante el día es una de las claves para estar saludables y mejorar nuestra calidad de vida. ¿Tienes el hábito de caminar regularmente? Si aún no lo incorporas, te contamos por qué es esencial.
La vida moderna y la tecnología sin duda nos ha traído distintos beneficios, como la capacidad de trabajar desde distintos lugares del mundo y un mayor alcance en cuanto al entretenimiento.
Sin embargo, la modernización y tener todo a un sólo clic, también trajo consigo otro fenómeno: cada día, los humanos somos más sedentarios.
Un ejemplo de esta compleja realidad, es lo que reveló un estudio realizado este año por el Journal of Sports and Health Science, que concluyó que los adolescentes chilenos están entre los más inactivos a nivel mundial, y según estudios anteriores, es una situación que incluye a todos los rangos etarios.
¿Qué hacer para contrarrestar los efectos del sedentarismo? Incluir caminatas diarias de 30 minutos o más en la rutina es una excelente forma de comenzar a cambiar nuestros hábitos y gozar de los beneficios de estar en movimiento.
¿Por qué es bueno caminar 30 minutos al día?
Los seres humanos estamos hechos para estar en movimiento y si aprovechamos esta cualidad de nuestra anatomía, tanto el cuerpo como la mente lo reflejarán mejorando nuestra salud en general.
Una actividad tan cotidiana y accesible como caminar, puede entregarnos distintos beneficios, como:
- Mejorar la salud cardiovascular: caminar regularmente fortalece el corazón, mejorando la circulación y reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas. Al ser una actividad aeróbica moderada, ayuda a bajar la presión arterial y a mejorar los niveles de colesterol, protegiendo así el sistema cardiovascular.
- Ayudar a controlar el peso: las caminatas diarias son una forma efectiva de quemar calorías, lo que ayuda a mantener o perder peso. Aunque no es una actividad de alto impacto como correr, caminar a un ritmo moderado durante 30 minutos puede quemar entre 150 y 200 calorías, dependiendo de factores como el peso y la velocidad.
- Fortalecer músculos y huesos: el movimiento repetido al caminar ayuda a fortalecer los músculos de las piernas, los glúteos y el abdomen. También es beneficioso para los huesos, ya que es una actividad de bajo impacto que promueve la densidad ósea, lo que puede reducir el riesgo de osteoporosis.
- Reducir el estrés: caminar al aire libre, especialmente en entornos naturales, puede reducir los niveles de cortisol (la hormona del estrés) y aumentar la producción de endorfinas, lo que mejora el estado de ánimo y ayuda a combatir la ansiedad y la depresión.
- Aumentar los niveles de energía: realizar caminatas diarias de 30 minutos o más estimula el flujo sanguíneo y mejora la oxigenación del cuerpo, lo que puede aumentar los niveles de energía a lo largo del día. Es una excelente forma de combatir la fatiga y mantenerse más alerta sin necesidad de recurrir a estimulantes como el café.
Si te animas a caminar todos los días, también podrás ver mejoras en:
- La calidad del sueño
- Ánimo y salud mental
- Digestión
- Niveles de azúcar en sangre
- Postura y movilidad articular
En Andes Salud, queremos acompañarte en el camino hacia una vida más sana. Si quieres consejos personalizados para un mayor bienestar, consulta con nuestros especialistas. ¡Estamos contigo siempre!
