Se estima que entre el 20% y 30% de los adultos en Chile padece de esta condición venosa, que además de afectar a nivel estético, puede generar molestias importantes, perjudicando el bienestar y la calidad de vida. ¿Tienes várices y quieres tratarlas de forma definitiva? ¡Te contamos cómo!
Las várices son venas dilatadas y tortuosas que suelen aparecer en las extremidades inferiores, principalmente en las piernas.
Su desarrollo se debe a un mal funcionamiento de las válvulas que se encuentran dentro de las venas, que son justamente las encargadas de abrirse cuando la sangre venosa fluye hacia el pulmón para captar oxígeno y cerrarse para impedir que ésta se devuelva.
Como explica el Dr. Celso Bustos, cirujano vascular de Clínica Andes Salud Concepción, ”si las válvulas de las venas están dañadas o debilitadas, se dificulta el flujo eficiente hacia el tórax . El resultado de esto, es que la sangre se empieza a acumular en las venas, provocando que se hinchen las piernas, pudiendo aparecer calambres, pesadez y que las venas se vean abultadas”.
Si bien, hay ocasiones en que las várices no van más allá de un problema estético, existen casos en que pueden causar bastante molestia y dolor, además de aumentar el riesgo de complicaciones, como trombosis y/o úlceras. Por eso, es esencial informarse sobre sus posibles causas y los tratamientos disponibles para mejorarlas.
¿Qué síntomas provocan las várices?
Cuando comienzan a aparecer y en una etapa temprana, las várices pueden verse como venas pequeñas y de aspecto retorcido que se notan bajo la piel, generalmente de color azul, morado o verdoso.
A medida que progresa, quien sufre de esta condición también puede experimentar:
- Sensación de pesadez en las piernas, sobre todo al final del día
- Hormigueo o picazón en la piel sobre las venas afectadas
- Calambres musculares, especialmente durante la noche
- Hinchazón en los tobillos, pies y pantorrillas
- Cambios en la piel, como tirantez o cambios en la textura o color.
Según recomienda el Dr. Bustos, es importante observar activamente las piernas y consultar lo antes posible si se aprecian venas visibles, que tengan aspecto varicoso. “Mientras antes lo tratemos, mejor es el pronóstico y menores las molestias asociadas”.
¿Quiénes tienen mayor riesgo de desarrollarlas?
Si bien cualquier persona podría llegar a padecer de várices, existen factores que generalmente aumentan el riesgo y pueden provocar su aparición durante la adultez.
Como describe el Dr. Bustos los siguientes puntos pueden incidir en el desarrollo de várices:
- Ser mujer: las mujeres son más propensas debido a los cambios hormonales asociados con la pubertad y el embarazo. Las hormonas y sus fluctuaciones pueden debilitar las paredes venosas.
- Tener antecedentes familiares: la predisposición genética es uno de los factores más significativos. Si uno o ambos padres tienen várices, el riesgo aumenta considerablemente.
- Tener más de 50 años: si bien pueden surgir antes que eso, con la edad, las venas van perdiendo elasticidad y las válvulas se debilitan, lo que facilita la aparición de várices, sobre todo si hay factores genéticos.
- Tener sobrepeso u obesidad: el exceso de peso genera mayor presión sobre las venas, especialmente en las extremidades inferiores.
- Estar largas horas de pie o sentados: profesiones que implican estar de pie o sentado durante mucho tiempo, como profesores, enfermeros o trabajadores de oficina, incrementan el riesgo debido a la acumulación de sangre en las piernas.
- Ser sedentario(a): la falta de actividad física reduce la circulación sanguínea, lo que puede favorecer la formación de várices.
Así como existen factores de riesgo, también hay hábitos preventivos, como el ejercicio físico regular, mantener un peso saludable, usar medias de compresión en caso de riesgo elevado y evitar fumar, ya que este vicio es nocivo para la salud de las venas.
¿Cómo es el tratamiento para las várices?
Actualmente, existen opciones de tratamientos mínimamente invasivos y efectivos para tratar las várices y mejorar los síntomas asociados.
En Andes Salud, contamos con equipos de especialistas en cirugía vascular periférica, con amplia experiencia en procedimientos como:
- Escleroterapia: se inyecta una solución química en las venas afectadas que causa su colapso y eventual desaparición. Es un procedimiento ambulatorio, rápido y con mínimas molestias, adecuado para várices pequeñas o medianas.
- Ablación por radiofrecuencia o láser endovenoso: se introduce un catéter fino en la vena y, mediante calor generado por radiofrecuencia o láser, se sella. Luego, el cuerpo redirige naturalmente el flujo sanguíneo a venas sanas.
- Safenectomía: procedimiento tradicional en el que se extraen las venas varicosas mediante una cirugía, en pacientes que califiquen para esta modalidad. Si eres paciente Fonasa, puedes acceder a este tratamiento a través de tu Bono PAD Safenectomía Unilateral en nuestra clínica Andes Salud Concepción a un precio fijo y conocido ($372.060), con un cuidado integral y de la mano de expertos.
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