En noviembre se conmemora el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, una instancia que nos invita a visibilizar la importancia de estar atentos a las señales que pueden indicar que nuestros hijos están siendo víctimas de bullying y qué hacer como padres o cuidadores para entregarles el apoyo que necesitan.
El primer jueves de noviembre de cada año se conmemora el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, fecha instaurada por la UNESCO para generar conciencia sobre una situación a la que miles de niños y adolescentes están expuestos cada día.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el acoso escolar o bullying como “la intimidación física, psicológica o sexual contra una persona en edad escolar, reiterada en el tiempo, que puede provocar daño o tristeza en la víctima o en un grupo de víctimas”.
Como explica Iván Armstrong, psicólogo de Clínica Andes Salud Concepción, “el acoso escolar, al que ahora también se ha sumado el ciberacoso o hostigamiento a través de redes sociales, es una situación que puede afectar de forma importante la salud mental y física de los niños y jóvenes. Como cuidadores, debemos tomarle el peso que tiene y apoyarlos, porque es un daño que puede perdurar y marcarlos en su desarrollo como adultos”.
Respecto a la situación del acoso escolar en Chile, un estudio realizado entre 2020 y 2022 por la ONG Internacional Bullying sin Fronteras reveló que en ese periodo, se registraron 5.934 casos graves de acoso escolar, siendo la principal causa la apariencia física (32,3%).
¿Qué señales pueden indicar que un niño sufre de bullying?
Aunque cada niño o adolescente puede vivir esta experiencia de forma distinta, expresando o no su situación a sus padres o cuidadores, existen algunas señales o conductas comunes que pueden surgir ante el acoso escolar reiterado.
Un menor que está siendo víctima de bullying o ciberacoso, podrá presentar:
- Cambios de humor repentino
- Baja autoestima e inseguridad
- Menor rendimiento escolar
- Insomnio y/o pesadillas
- Cambios en hábitos alimentarios
- Pérdida o ruptura de elementos personales
- Dolores de estómago/cabeza frecuentes
- Evitar situaciones sociales
- Rechazo a asistir al colegio
- Apaga su celular repentinamente
- Angustia luego de ver redes sociales o Internet
¿Qué podemos hacer como padres?
Como es un tema complejo, el bullying debe ser abordado desde distintos puntos de vista, tanto como padres, como apoderados o administradores de los establecimientos escolares.
“Ante estas señales, es muy importante que validemos a nuestros hijos, que los escuchemos abiertamente, que estemos ahí, pero sin presionarlos. Podemos asesorarnos con un profesional en salud mental infantil, para planear una estrategia de apoyo, evitando que ellos se sientan expuestos, ya que eso puede ser contraproducente”, explicó el Dr. Armstrong.
En cuanto a los colegios, el profesional también indica que es fundamental que existan planes de acción bien formulados, para apoyar a las víctimas y también, abordar a los victimarios. “Un niño que acosa a otro, también está expresando un problema emocional, el manejo debe ser desde distintas dimensiones”.
En este sentido, en el año 2011 se promulgó en Chile la Ley 20.536 sobre Violencia Escolar, que entrega el respaldo a los niños acosados y a sus padres, ordenando a los establecimientos educacionales a adoptar sanciones disciplinarias según su reglamento interno, contra quienes estén llevando a cabo esos actos.
¿Crees que tu hijo puede estar siendo víctima de acoso escolar? En Andes Salud, contamos con equipos de profesionales en salud mental, para apoyarte y entregarle a tu hijo un espacio de confianza para abordarlo. ¡Estamos para ti y tu familia!
